Organizaron una clase pública en la Facultad de Humanidades en repudio al despido masivo que se produjo en la empresa alimenticia. En la Facultad de Humanidades se llevó a cabo una protesta de distintas agrupaciones estudiantiles y sociales en reclamo por el despido masivo de trabajadores de la empresa Kraft (ex Terrabusi) en Buenos Aires.
El conflicto en la fábrica alimenticia se inició cuando la empresa, Kraft Foods Terrabusi, despidió a 160 trabajadores, incluido los integrantes de la Comisión Interna, varios delegados y tres miembros de STIA (Sindicato de Trabajadores de Industrias de la Alimentación), en represalia a la exigencia de medidas sanitarias frente a la epidemia de la Gripe A, por parte de los trabajadores.
El 18 de Agosto el Ministerio de Trabajo de la Nación ordenó la inmediata reincorporación de los 160 despedidos. La empresa de capitales “yankees” no acató la medida, ni la intimación posterior que realizo el Ministerio de Trabajo.
La protesta realizada en Humanidades consistió en el corte de la calle Otero (entre Belgrano y San Martín) para la realización de una clase pública donde se explicaban los motivos de la misma.
José Mendoza (Unión de Juventudes por el Socialismo del Partido Obrero) expresó que “a nivel nacional se están organizando clases públicas, cortes de calles y cortes de rutas. Se está pidiendo que se reincorpore a todos los delegados y a todos los despedidos de la empresa Kraft-Terrabusi.
El país ha nacionalizado la lucha porque se entiende que los trabajadores de Terrabusi son el ejemplo que hay que dar en todas las fábricas. Ya hay más de 300 mil despedidos en todo el país, que el mismo INDEC ha sacado a relucir. En ese sentido, si Terrabusi gana se puede dar un giro en el sentido nacional.
El Gobierno ha dado subsidios a las empresas de gas, a las empresas de luz para dar un impuestazo a toda la clase obrera. Ese impuestazo se está viendo y la clase obrera está saliendo no solamente a favor de que se reincorporen los trabajadores, sino también con sus propias reivindicaciones”, señaló.
A esto agregó que “hay toda una política nacional de desguase de la educación pública y también de la salud. los estudiantes entienden que la lucha de los trabajadores va en unidad con la lucha de los estudiantes.
No queremos que esto vuelva a pasar, por lo tanto, la clase obrera junto con los estudiantes reclaman que el Gobierno dé políticas sociales, no para los despidos, no para las empresas sino para los propios trabajadores”, dijo.
Lucha nacional
En este sentido, Mendoza aseveró que “esta es una lucha nacional donde se están uniendo todos los sectores como los sindicatos, las organizaciones sociales, las agrupaciones de los centros de estudiantes de la facultad. Fue un lindo debate porque pudimos concluir lo que pasa en la universidad ya que no hay becas, no hay viandas ni comedores gratis. Hay chicos que vienen del interior y tienen que pagarse todo”.
“En Jujuy ocurre que empresas como Ledesma, Mina Pirquitas y los tabacaleros pagan sueldos por debajo de la canasta familiar, como también los trabajadores estatales. Hoy en día tenemos un pronunciamiento de los trabajadores en negro de la Municipalidad, que no pueden organizarse porque están totalmente regimentados”, sostuvo.
Por otro lado, Mario Leguiza (Comité Provincial del Partido Obrero) manifestó que “se intensifican las medidas de fuerza porque el acuerdo que tenían que discutir los trabajadores con Kraft ha sido negativa para los trabajadores porque fueron rechazadas las propuestas que se hicieron desde el Ministerio de Trabajo y no se va a reincorporar al 100 por ciento de los trabajadores despedidos. Es decir, que se ha rechazado esta propuesta por parte de los trabajadores.
A partir de eso comienza una propuesta de los trabajadores de Kraft de impulsar una jornada nacional, avanzamos en este sentido para que la patronal no siga explotando a los trabajadores y que recuperen el derecho a su fuerza productiva.
La clase pública fue propuesta por agrupaciones de la facultad como el UJS, el Partido Obrero, el PTS, el PCR, es decir que es una manifestación de lo que está pasando a nivel nacional”, indicó.
También subrayó que “nosotros venimos denunciando hace bastante tiempo, más que nada al sector comprendido como dirigencia sindical, el Movimiento Obrero Jujeño, que pacta salarios de pobreza como en las últimas semanas, donde los trabajadores van a recibir 100 pesos en negro en dos cuotas cuando hay una inflación del 30 por ciento anual. Es decir que las condiciones laborales son paupérrimas para los trabajadores de Jujuy.
El Partido Obrero plantea que tienen que haber salarios de canasta familiar aumentados por el costo de vida”.
Otra agrupación presente fue “Sumate”, cuyo representante, Juan Pablo Alba, expresó que “el tema Terrabusi es un tema que usamos como un disparador para poder movilizar al sector estudiantil para que se empiece a comprometer un poco más con las cuestiones sociales, con los problemas que no pueden obviar los estudiantes como los problemas de los trabajadores.
En el contexto de esta crisis internacional, los despidos de las fábricas –sobre todo del sector privado- son muy grandes. Pero el problema de Jujuy radica principalmente en que hay una alta dependencia del sector estatal, ya que el 50 por ciento de los trabajadores de la provincia dependen del sector estatal.
Encima el Gobierno provincial no tiene fondos, vive de préstamos y no da para más. Parece que se viene algo bastante fuerte en la provincia”.
Y añadió que “estamos a la expectativa de lo que se solucione en Buenos Aires, dependiendo de eso veremos qué medidas tomamos. Pero, de no llegar a un acuerdo que sea satisfactorio para los trabajadores de Terrabusi, volveremos a estar en las calles y hacer todo lo necesario para no permitir que avance el imperialismo y los despidos”, sentenció.
El conflicto en la fábrica alimenticia se inició cuando la empresa, Kraft Foods Terrabusi, despidió a 160 trabajadores, incluido los integrantes de la Comisión Interna, varios delegados y tres miembros de STIA (Sindicato de Trabajadores de Industrias de la Alimentación), en represalia a la exigencia de medidas sanitarias frente a la epidemia de la Gripe A, por parte de los trabajadores.
El 18 de Agosto el Ministerio de Trabajo de la Nación ordenó la inmediata reincorporación de los 160 despedidos. La empresa de capitales “yankees” no acató la medida, ni la intimación posterior que realizo el Ministerio de Trabajo.
La protesta realizada en Humanidades consistió en el corte de la calle Otero (entre Belgrano y San Martín) para la realización de una clase pública donde se explicaban los motivos de la misma.
José Mendoza (Unión de Juventudes por el Socialismo del Partido Obrero) expresó que “a nivel nacional se están organizando clases públicas, cortes de calles y cortes de rutas. Se está pidiendo que se reincorpore a todos los delegados y a todos los despedidos de la empresa Kraft-Terrabusi.
El país ha nacionalizado la lucha porque se entiende que los trabajadores de Terrabusi son el ejemplo que hay que dar en todas las fábricas. Ya hay más de 300 mil despedidos en todo el país, que el mismo INDEC ha sacado a relucir. En ese sentido, si Terrabusi gana se puede dar un giro en el sentido nacional.
El Gobierno ha dado subsidios a las empresas de gas, a las empresas de luz para dar un impuestazo a toda la clase obrera. Ese impuestazo se está viendo y la clase obrera está saliendo no solamente a favor de que se reincorporen los trabajadores, sino también con sus propias reivindicaciones”, señaló.
A esto agregó que “hay toda una política nacional de desguase de la educación pública y también de la salud. los estudiantes entienden que la lucha de los trabajadores va en unidad con la lucha de los estudiantes.
No queremos que esto vuelva a pasar, por lo tanto, la clase obrera junto con los estudiantes reclaman que el Gobierno dé políticas sociales, no para los despidos, no para las empresas sino para los propios trabajadores”, dijo.
Lucha nacional
En este sentido, Mendoza aseveró que “esta es una lucha nacional donde se están uniendo todos los sectores como los sindicatos, las organizaciones sociales, las agrupaciones de los centros de estudiantes de la facultad. Fue un lindo debate porque pudimos concluir lo que pasa en la universidad ya que no hay becas, no hay viandas ni comedores gratis. Hay chicos que vienen del interior y tienen que pagarse todo”.
“En Jujuy ocurre que empresas como Ledesma, Mina Pirquitas y los tabacaleros pagan sueldos por debajo de la canasta familiar, como también los trabajadores estatales. Hoy en día tenemos un pronunciamiento de los trabajadores en negro de la Municipalidad, que no pueden organizarse porque están totalmente regimentados”, sostuvo.
Por otro lado, Mario Leguiza (Comité Provincial del Partido Obrero) manifestó que “se intensifican las medidas de fuerza porque el acuerdo que tenían que discutir los trabajadores con Kraft ha sido negativa para los trabajadores porque fueron rechazadas las propuestas que se hicieron desde el Ministerio de Trabajo y no se va a reincorporar al 100 por ciento de los trabajadores despedidos. Es decir, que se ha rechazado esta propuesta por parte de los trabajadores.
A partir de eso comienza una propuesta de los trabajadores de Kraft de impulsar una jornada nacional, avanzamos en este sentido para que la patronal no siga explotando a los trabajadores y que recuperen el derecho a su fuerza productiva.
La clase pública fue propuesta por agrupaciones de la facultad como el UJS, el Partido Obrero, el PTS, el PCR, es decir que es una manifestación de lo que está pasando a nivel nacional”, indicó.
También subrayó que “nosotros venimos denunciando hace bastante tiempo, más que nada al sector comprendido como dirigencia sindical, el Movimiento Obrero Jujeño, que pacta salarios de pobreza como en las últimas semanas, donde los trabajadores van a recibir 100 pesos en negro en dos cuotas cuando hay una inflación del 30 por ciento anual. Es decir que las condiciones laborales son paupérrimas para los trabajadores de Jujuy.
El Partido Obrero plantea que tienen que haber salarios de canasta familiar aumentados por el costo de vida”.
Otra agrupación presente fue “Sumate”, cuyo representante, Juan Pablo Alba, expresó que “el tema Terrabusi es un tema que usamos como un disparador para poder movilizar al sector estudiantil para que se empiece a comprometer un poco más con las cuestiones sociales, con los problemas que no pueden obviar los estudiantes como los problemas de los trabajadores.
En el contexto de esta crisis internacional, los despidos de las fábricas –sobre todo del sector privado- son muy grandes. Pero el problema de Jujuy radica principalmente en que hay una alta dependencia del sector estatal, ya que el 50 por ciento de los trabajadores de la provincia dependen del sector estatal.
Encima el Gobierno provincial no tiene fondos, vive de préstamos y no da para más. Parece que se viene algo bastante fuerte en la provincia”.
Y añadió que “estamos a la expectativa de lo que se solucione en Buenos Aires, dependiendo de eso veremos qué medidas tomamos. Pero, de no llegar a un acuerdo que sea satisfactorio para los trabajadores de Terrabusi, volveremos a estar en las calles y hacer todo lo necesario para no permitir que avance el imperialismo y los despidos”, sentenció.
Actualizado ( Sábado, 03 de Octubre de 2009 05:11
